"No dejes para mañana lo que puedes hacer hoy", así dicen no?.. pero precisamente esto es algo que no aplico en mi vida, y menos si se trata de cuidar mi salud, asunto en el que soy bastante intemperante. Todo este tiempo por TV en la radio, internet, por todos los medios estuvieron anunciando la campaña nacional de vacunación contra la rubéola con estas palabras "Durante los meses de septiembre y octubre se realizará en todo el país la Campaña Nacional de Vacunación para el control de la Rubéola y la eliminación del Síndrome de la Rubéola Congénita. En la Ciudad, todas las mujeres entre los 15 y 39 años podrán vacunarse gratuitamente en distintos efectores de salud -independientemente de haber recibido dosis anteriores o haber tenido la enfermedad". Que de tanto leer las noticias escuchar radio ya casi me se de memoria este versito; pero aún así, no fui a vacunarme, hoy 31 de octubre se supone que es el último día y recién este domingo dije oh!! no me vacuné tendré que ir a la salita, pero no fuí, por la mañana el domingo dormí hasta tarde, luego tenía que hacer la limpieza de mi pieza, después con mi hermana nos pusimos a cocinar empanadas, así que pasó el día y la visita a un centro de salud quedó olvidada, entonces dije mañana sin falta iré a vacunarme, iré temprano y antes que comience mis cosas del día.. y así llegó el lunes y hacer algo los lunes es lo peor, así que terminé dejando para el martes. Hoy si o sí debo ir a vacunarme, ya son las 2:46 pm, y puse como tope que a las 4 debo estar en el hospital, al final decidí irme al hospital, porque ya veo que si sigo postergando las cosas, llegará el caso que podría ir a una salita y ya no encuentre vacunas.. ahí si me ato una piedra al cuello y me tiro del puente jajajaa todo por dejar de hacer las cosas. Y ya sé.. están hablando de extender la campaña un mes más.. pero no!!! prefiero no escuchar esas palabras sino ahora o nunca voy a vacunarme porque ya me conozco sino luego estaré especulando con que después lo haré. Ojo!! no siempre soy así de postergar las cosas, así de este modo, y para excusarme diré que esto de vacunarme no me llamó la atención, será tal vez porque pensaba que esta enfermedad ya estaba erradicada, pero claro con personas como yo, que no hagan caso a las campañas, así nunca se erradicará esta enfermedad no?.. Bueno ojalá al menos a última hora las mujeres tomen conciencia y vayan a vacunarse, que pensándolo bien, también se trata de ser responsables, de nuestra salud y la de un tercero tal vez. Ufff ya falta una hora y 6 minutos para estar en el hospital.. y creo que me da miedo ir al hospital.. ouch.. mejor no pensaré en nada.
martes, octubre 31, 2006
viernes, octubre 27, 2006
Presento en sociedad a mi sobrino peludo, se llama Morgan, aún es cachorro, pero creo que ya pesa más que yo. Dicen que llegará a pesar como 100 kilos, claro con todo lo que come.. no es para menos.
En mi familia nunca fuimos de tener perros grandes, así que más o menos nos estamos acostumbrando a él, y ¿saben? es el perro más tierno que conozco, es grandote, que intimida, sus dientes asustan, pero con nosotros es un amor, mucha fachada de malo pero nada más.. pero vieron en la foto tiene una cara de sufrido que da pena jajajaja, y si supieran a falta de nietos mi mamá, lo tiene como si fuera su nieto. Bueno le falta su barrilito, perro rescatista es .. así que mejor se vaya preparando al menos en apariencia jejeje . Son lindos los perros no?
martes, octubre 24, 2006
El tiempo pasa y?....
El tiempo pasa y nos estamos poniendo viejos.. así dice una canción.. ¿será cierto eso? las mujeres por una cuestión de coquetería muchas, no quieren revelar su edad, y los varones al parecer van por el mismo rumbo.
Cuando era niña, recuerdo que no quería crecer, la pasaba tan bien en mi infancia.. que ya cuando pasé los 5 años decía que quería ser siempre un niño, pero el tiempo es cruel a uno no le dan la posibilidad de elegir en que etapa de la vida quedarse, aunque si bien cada etapa, tiene lo bueno de vivirla.. pero qué se yo.. yo siempre deseé ser una niña, quizás porque me daba cuenta que al crecer también uno tenía que ir tomando más responsabilidades y yo tan solo quería y pensaba en jugar y jugar. Recuerdo bien las veces en que sí deseé ser grande; y eso sucedía cuando me retaban o por alguna travesura mi mamá llegaba a darme alguna paliza, que bien merecida la tenía, pero yo refunfuñaba en mi interior diciendo.. "si fuera grande nadie me pegaría, porque a ella que es grande no le pegan, ella si rompe los vasos nadie ni la reta ni nada, y a mí si".. pero debo aclarar que de chica era demasiado inquieta solía romper mucho las cosas de vidrio ya sea por estar jugando o por ser torpe y querer hacer las cosas rápido para luego irme a jugar. Recuerdo que una vez rompí como una docena de vasos mi mamá me dijo lily no apiles los vasos así, que se pegan y luego los vas a romper, yo por no hacerle caso y porque me gustaba que al lavar los vasos mi mano quedara atorada al querer separlos, los apilaba uno arriba de otro y claro como estaban los vasos mojados se pegaron y queriendo separarlos rompí todos los vasos que había apilado, y ese mismo día luego del reto mi mamá estaba acomodando el nido de una gallina que no recuerdo bien cómo es que la criamos, porque no éramos de tener gallinas, pero existió ésta, y la gallina había puesto huevos en una pieza que estaba en contrucción en medio de las maderas y herramientas.. y mi mamá me pidió que la ayudara, cuando me llamó recuerdo que me dijo.. lily.. tené cuídado cuando entres no vengas corriendo y mirá por donde caminas no vayas a pisarrrrrrrrrrrrr.. y ahí quedó porque yo ya entraba corriendo y el primer paso que dí.. fue donde estaban los huevos levanté mi pie y pisé otros más, y para mi mala suerte levantaba mi pie y no paraba de pisar los huevos. Imagínense luego que hizo mi mamá, obviamente me castigó y me dió una paliza, que hasta hoy la recuerdo, y al recordarla solo me hace reír, porque era feliz y fui feliz..
Pero.... crecí y las cosas ya comenzaban a dejar de ser juegos, las responsabilidades aumentaban, en la escuela a medida que pasaban los años las exigencias eran más.. y así hasta llegar ha ser adulta. Aún a pesar de ser adulta, sigo siendo irresponsable .. bah! no sé si decir irresponsable, pero algo irresponsable si..
Y acabo de cumplir 34 años, wow si que estoy pensando que esta edad ya está pesando.. no en como me siente sino como suena..que suena a haber vivido bastante, y viví bastante??.... no lo sé... solo viví y muchas cosas.. aunque no sé por qué de niña nunca imaginaba que llegaría a cumplir los 30, recuerdo cuando mi mamá cumplió los 28 años, ya nos tenía a las cuatros hijas y yo veía tan lejano eso de tener casi 30 años que solía decir a mis amigas.. "yo creo que a los 30 no llegaré, porque no quisiera ser vieja, dicen que después de los 25 la gente ya va en bajada", ya pasé los 30.. y menos mal que no soy vieja jejeje.. si bien hay cosas que aún no concreté en mi vida pero sé que todavía queda mucho por vivir.
Con todos mis defectos y virtudes que las tengo aunque no lo crean, me siento muy querida, desde las 5:30 de la mañana estoy recibiendo saludos... se pasan eh?, así que hoy estoy ojerosa, porque hasta desvelada estoy... vaya que novedad el estar ojerosa jaja.. pero hoy como decía un slogan de TV.. "aunque usted no lo crea" me maquillé jajaja cosa que no se hacer, pero al menos hoy intenté ponerme algo en la cara, una base de maquillaje, y un poco de polvo para la cara, un poco de color en los labios.. y me gusté, por qué hoy?? no lo sé.. tal vez es que no quiero mirarme en el espejo y parecer más vieja, pero si de ayer a hoy no cambié nada... bueno, igual tal vez es hora de comenzar a usar el maquillaje que por hacerle un favor le compro a mi tía, y mejor lo empezaré a usar antes de que llegue la fecha de vencimiento, que ni idea sé de cuándo es.. pero por las dudas mejor usarlo no? y también será que de ahora en más tendré que comenzar a pensar que las empresas de cosméticos necesitan de clientes un poco más asíduas sino irían a la bancarrota con la demanda efímera de clientas como yo no?.. bah!! no sé digo de pronto me parece.
viernes, octubre 20, 2006
Igual estoy feliz
Tenía tantas cosas en mente para escribir, a veces pienso que me inundan las ideas, y no sé por donde empezar y en otros momentos desaparece todo de mi mente y quedo out de todas mis ideas, hoy podría escribir y contar que por enésima vez tuve mi encuentro con los chorros (chorro=ladrón, ratero) como lo llamen. A estos pasos, creo que terminaré entrando al libro de record guines, por la cantidad de asaltos que me sucedieron, y no es que quiera ser trágica o esté exagerando, pero es así.. tanto que un tiempo hasta hice taebo solo pensando en que debía estar preparda para defenderme.
Hace un tiempo atrás.. estaba tan paranoíca con eso, que todas las personas que veía en la calle, para mí eran ladrones, tanto que una noche cuando regresaba de la facultad.. iba a tomar el tren, eran como las 11 de la noche, iba rápido porque estaba sobre la hora, en eso sentí unos pasos atrás.. bueno había gente caminando era obvio que sentiría pasos atrás, pero sentí unos pasos más sospechosos que de los demás, así que yo comencé a asustarme y apresuré mis pasos, tanto que sin darme cuenta ya estaba por correr y en eso alguien me pasa corriendo, era un anciano.. y riéndo me dice: "tan feo soy que hasta huyes?" jajajaja yo no lo había visto.... pero si huía del pobre anciano... eran sus pasos los que me habían asustado jajaja.
Como decía.. por enésima vez, hoy tuve mi encuentro con los chorros, ya la próxima tendré que decirles, hola muchachos, ya vienen a visitarme?? jejeje; vinieron a asaltarme; 7 personas en total, onda asalto comando?? .. bueno tanto así no.. ya estoy exagerando, pero si eran 7 en total, venían a llevarse las pcs.. pero como siempre me pasa, tengo un Dios que me cuida, viví quinientos mil asaltos, pero de esos asaltos nunca llegaron a llevarse nada, o al menos nada importante ni nada que lamentar, los otros casos vividos no lo contaré, algunos fueron muy traumáticos, y sería de amarillista contarlo, pero lo que si debo decir es que tengo un Dios, como dicen algunos, un Dios aparte.. por lo que yo solo digo, soy una mimada de Dios, y esta vez aunque llegaron a tomar dos de las computadoras.. y las tenían listas para llevarse, pude pedir socorro y eso que no pude activar la alarma del monitoreo, el hecho es que los que chorros al notar eso huyeron; dejando todo, el monitoreo y la policía llegaron al instante, y los ladrones no se habían llevado nada... así que estaba todo ok. Terminé diciendo a una amiga, que lo que hicieron hoy fue darle emoción a mi mañana nada más jajajaja.
¿Y saben qué? es raro, pero me siento feliz, en casa no contaré esto, ya no quiero asustarlos, aunque les conté a mis hermanas pero no les diré nada a mis padres porque ellos luego terminan asustándose y más porque siempre a mi me pasa, porque creo que hasta mis padres sienten pena de que yo sea como la miel es a las moscas, pero yo a los ladrones jajaja o soy extremadamente despistada, cosa que no creo, que tal vez soy muy confiada, pero tampoco creo ser así.. el hecho es que nací y al parecer las emociones me rodearán por los siglos de los siglos jajaja.
Lo que sí.. es que lo que pensaba contarles hoy, quedará para otra oportunidad, ahora ya me dió fiaca y solo me puse a contarles esto que sucedió en mi mediodía, y claro como me siento feliz, mientras por este momento disfruto de escuchar música que es lo que alimenta mi alma.
Que tengan un buen fin de semana!! y regresaré la semana que viene. Ah!! y así como Dios cuida de mi, sé que lo hará de vos, tan solo confía en eso, y por las mañana pídele su protección y guía.
Besos
martes, octubre 17, 2006
Palabras Mágicas
Me preguntaba si a medida que pasan los años como sociedad nos vamos olvidando de las reglas de cortesía, o es que dichas reglas es que ya pasaron de moda? porque noto que la gente cada vez es menos cortés, las reglas de cortesía que debieran ser parte integral de nuestra formación, en muchas de las personas están totalmente ausentes. De chica había aprendido que para una buena convivencia eran muy importantes usar las "palabras mágicas", así las llamo yo.
Algunos dicen que las reglas de cortesía, las tienen que enseñar en la escuela, yo creo que eso uno las aprende en casa, cada una de las personas aprende eso en el hogar. Porque si en el hogar uno de chico no está acostumbrado a escuchar que los padres pidan algo "por favor" o digan "gracias", que quizás esas palabras sean las más básicas y menos dichas. Costará más si uno las aprende en la escuela, pero aún así.. donde fuere que uno las aprendiera lo bueno consiste en aplicarlas en nuestro trato diario.
Algunos dicen que las reglas de cortesía, las tienen que enseñar en la escuela, yo creo que eso uno las aprende en casa, cada una de las personas aprende eso en el hogar. Porque si en el hogar uno de chico no está acostumbrado a escuchar que los padres pidan algo "por favor" o digan "gracias", que quizás esas palabras sean las más básicas y menos dichas. Costará más si uno las aprende en la escuela, pero aún así.. donde fuere que uno las aprendiera lo bueno consiste en aplicarlas en nuestro trato diario.
Personalmente a mi me desagrada cuando alguien me pide algo y no dice "por favor", o no sabe dar "gracias" y a veces a modo de broma o gastada les digo.. ¿y?.... la palabra mágica?? pero es que todo el mundo parece olvidar esas palabras, y cuan necesarias y útiles son, de hecho, el decirlas hace hasta cambiar la actitud de a quien se los diga. Porque no es lo mismo decir.. Pasame ese cuaderno! a decir.. por favor, me pasás ese cuaderno?. Del segundo modo uno ya tiene otra disposición bah! no sé digo.. a mi me pasa.
Mi abuela suele decir es que ahora los jóvenes ya ni saben saludar y es que tendrá razón? y todo parece indicar que sí, que a medida que fuimos creciendo, también nos fuimos olvidando de la cortesía, aunque esto es tan solo un detalle, porque el ser cortés involucra mucho más. Pero si en los pequeños detalles podemos ser cuidadosos, luego lo seremos en lo más grande.
Hay una frase que alguna vez leí por allí, que decía: "hay gente tan pobre, tan pobre..... pero tan pobre que solo tiene dinero"; digo esto porque también vi que muchos que tienen empleados, por tener gente a su servicio tampoco usa esta palabras mágicas, pero todos son personas y todos necesitan ser tratados con respeto, y cuán cierto es que nos volveremos pobres, si comenzamos a perder estas palabras mágicas y las muchas más palabras que hay que hacen a la cortesía (además de palabras gestos)... entonces si perdemos eso llegaremos ha ser personas realmente pobres. Porque el ser cortés, no depende del estrato social del que uno venga, ni el poder adquisitivo que uno tenga o deje de tener, sino del ser educado, y a eso tenemos acceso todas las personas.
viernes, octubre 13, 2006
La Cara que pones
No eres responsable de la cara que tienes, eres responsable de la cara que pones ...
Se dice que hace tiempo, en un pequeño y lejano pueblo, había una casa abandonada. Cierto día, un perrito buscando refugio del sol, logró meterse por un agujero de una de las puertas de dicha casa.
El perrito subió lentamente las viejas escaleras de madera. Al terminar de subirlas se topó con una puerta semi abierta; lentamente se adentró en el cuarto. Para su sorpresa se dio cuenta que dentro de ese cuarto habían
mil perritos más observándolo tan fijamente como él los observaba a ellos.
El perrito comenzó a mover la cola y a levantar sus orejas poco a poco. Los mil perritos hicieron lo mismo. Posteriormente sonrió y le ladró alegremente a uno de ellos. El perrito se quedó sorprendido al ver que los mil
perritos también le sonreían y ladraban alegremente con él.
Cuando el perrito salió del cuarto se quedó pensando para sí mismo:
"¡Qué lugar tan agradable! ¡Voy a venir más seguido a visitarlo!" Tiempo después otro perrito callejero entró al mismo sitio y se encontró entrando al mismo cuarto. Pero a diferencia del primero, este perrito al ver a los otros mil perritos del cuarto, se sintió amenazado ya que lo estaban mirando de una manera agresiva. Posteriormente empezó a gruñir; obviamente vio como los mil perritos le gruñían a él. Comenzó a ladrarles ferozmente y los otros mil perritos le ladraron también a él. Cuando este perrito salió del cuarto pensó: "¡Qué lugar tan horrible es éste! ¡Nunca más volveré a entrar aquí!"
En el frente de dicha casa se encontraba un viejo letrero que decía: "La casa de los mil espejos".
Se dice que hace tiempo, en un pequeño y lejano pueblo, había una casa abandonada. Cierto día, un perrito buscando refugio del sol, logró meterse por un agujero de una de las puertas de dicha casa.
El perrito subió lentamente las viejas escaleras de madera. Al terminar de subirlas se topó con una puerta semi abierta; lentamente se adentró en el cuarto. Para su sorpresa se dio cuenta que dentro de ese cuarto habían
mil perritos más observándolo tan fijamente como él los observaba a ellos.
El perrito comenzó a mover la cola y a levantar sus orejas poco a poco. Los mil perritos hicieron lo mismo. Posteriormente sonrió y le ladró alegremente a uno de ellos. El perrito se quedó sorprendido al ver que los mil
perritos también le sonreían y ladraban alegremente con él.
Cuando el perrito salió del cuarto se quedó pensando para sí mismo:
"¡Qué lugar tan agradable! ¡Voy a venir más seguido a visitarlo!" Tiempo después otro perrito callejero entró al mismo sitio y se encontró entrando al mismo cuarto. Pero a diferencia del primero, este perrito al ver a los otros mil perritos del cuarto, se sintió amenazado ya que lo estaban mirando de una manera agresiva. Posteriormente empezó a gruñir; obviamente vio como los mil perritos le gruñían a él. Comenzó a ladrarles ferozmente y los otros mil perritos le ladraron también a él. Cuando este perrito salió del cuarto pensó: "¡Qué lugar tan horrible es éste! ¡Nunca más volveré a entrar aquí!"
En el frente de dicha casa se encontraba un viejo letrero que decía: "La casa de los mil espejos".
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Todos los rostros del mundo son espejos... Decide cuál rostro llevarás por dentro y ése será el que mostrarás. El reflejo de tus gestos y acciones es lo que proyectas ante los demás. Las cosas más bellas del mundo no se ven ni se tocan, sólo se sienten en el corazón.
lunes, octubre 09, 2006
Bolivia, el país que me duele
La semana pasada, nuevamente Bolivia fue noticia por unos enfrentamientos entre dos sectores de trabajadores mineros, en la ciudad minera de Huanuni, en el departamento de Oruro, estaba leyendo el diario cuando vi la nota "un enfrentamiento entre dos sectores de mineros, en el que había varias personas muertas y muchos heridos"; (ésta una nota con la misma noticia) cuando vi las imágenes, me puse triste, de seguro cualquiera que las vio se puso mal, me dolía el hecho de que parecía que nada se podía hacer, no estoy muy interiorizada con el trasfondo del problema, solo sé que vi, personas jóvenes, incluso mujeres que corrían, lloraban, la lucha de pobres contra otros pobres, seguro que ninguno de los dos tiene toda la razón como de seguro ninguno de los dos sectores está pidiendo y luchando por algo injusto, pero de algún modo pude comprender la bronca que sentían. Porque cuando fui niña viví en un centro minero y tengo noción de cómo es la vida en los centros mineros, quizás alguien que no vivió en esos lugares dirá: los mineros son todos unos locos, siempre fueron locos y ellos siempre quieren arreglar sus cosas siendo violentos, poniendo y haciendo explotar dinamitas (a propósito tengo otra historia para contar con respecto a esos explosivos, de cuando una vez casi morimos por causa de dichos explosivos-- estoy llegando a pensar que como dice mi amiga Mónica, mi vida realmente fue de películas, aunque todo se deba al hecho de que tuve unos padres jóvenes y aventureros-- familia de gitanos como a veces les digo jaja), volviendo al tema quizás quienes piensen en la locura de los mineros puede que tengan en parte razón, los mineros, suelen ser algo locos, pero cómo no estar locos si todos los días en tu trabajo, estás enfrentándote a la muerte? o ¿viendo a tu amigo morir en una explosión y al día siguiente seguir trabajando como si nada hubiera sucedido? imagino que situaciones así a cualquier ser humano lo alteran.
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Chorolque, ahí fue donde viví unos cuantos meses, dicen que es el campamento minero más alto, el cerro mide cerca de los 5.600mts de altura y el campamento minero donde se vive está en los 4.800 mts; vivir en esas alturas, es realmente un desafío, es muy frecuente allá que mueran los bebés, de hecho creo que las parturientas para tener sus hijos van a otra ciudad, para que sus hijos al nacer puedan vivir, porque muchos mueren si nacen allá y no es que esté exagerando, realmente es así, no hay flores ni jardines, creo que ni los perros existen ahí, la temperatura llega ha ser de hasta 20ºC Bajo Cero, corre muchísimo viento que a los niños para ir a la escuela solían decirles, que había que ir atados en soga, o si el viento soplaba muy fuerte, tenían que sentarse o abrazar un poste, porque sino el viento te llevaba y como se está en la montaña uno puede llegar a caer y caer; y así por el viento caer por la montaña.
Cuando a veces mi mamá nos mandaba a buscar el pan, teníamos que ir hasta la panadería que quedaba un poco más arriba en la montaña, quizás 50 metros más arriba, no podíamos subir sin hacer un descanso, una porque no estábamos aún adaptadas a esas alturas y nos faltaba el aire entonces descansábamos, respirábamos un poco y luego seguíamos caminando, y el cuerpo siente falta de oxígeno que uno se agita enseguida. Pero, no solo era el frío aterrador y viento fuerte que asustaba de aquel lugar, sino más bien, lo otro, las muertes que sucedían dentro de la montaña, porque era muy frecuente el sonido de la sirena del campamento, y el repicar de las campanas que indicaban que había ocurrido un accidente, y los accidentes eran que en las explosiones algunos pudieron quedar atrapados u otros con una suerte no mejor, morir destrozados por alguna explosión; si estábamos en la escuela y se oía la sirena era feo ver a mis compañeritos que eran hijos de mineros, porque todos quedaban pensando si no podían ser el papá de alguien que haya muerto en esa explosión, entonces salían las esposas de los mineros a ver si sus esposos salían del socavón, y al que había muerto, pues con suerte se lo traía en unas bolsas, que horrible realidad la de los que viven allí, mi caso era distinto porque mi papá era docente así que eso no le iba a suceder, pero hoy me pongo a pensar en mis compañeritos de entonces, y qué feo vivir así verdad? aunque me temo y estoy más que segura que alguno de ellos se hicieron mineros, aunque ahora los centros mineros ya no funcionen como antes, sino más bien ya son pocos los que quedaron, pero quien sabe en una de esas alguno de mis compañeros se quedó allá, porque mineros, creo que solo se animan ha ser los hijos de mineros. De lo contrario, habría que estar algo locos y ser un poco suicidas, para ser mineros en esas minas, con apenas unos cascos, lámparas y dinamitas (al margen de esto, mis dos abuelos locos, también fueron mineros, bueno dicen que eso apenas cuando mi papá tendría como 3 años y mi mamá aún no naciera, pero que ninguno de ellos soportaron el vivir así, y partieron hacia otros lugares y medios de vida).
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Con mis hermanas y mi mamá apenas llegamos a vivir en Chorolque medio año, no pudimos soportar una vida así. Y por una cuestión de preservar la vida de mi mamá fue que tuvimos que dejar a mi papá solo allá y nosotros regresar a nuestra casa en Tupiza. Creo que tuve la suerte de tener unos papás muy osados y jugados, porque esas cosas que viví de chica son las que me prepararon para yo poder decir.. puedo vivir donde sea, Y así lo creo.
Cuando tuvimos que venirnos de allá, fue porque un día que si mal no recuerdo fue para el día de Santa Bárbara, mis padres decidieron escalar la montaña, costumbre del lugar era que para esa fecha los que se animaran subieran hasta la cima de la montaña, y ellos recién llegados, no bien adaptados decidieron escalar la montaña y así mi papá, mi mamá, y los dos hermanos de ellos subieron los cinco mil y tantos metros, logrando llegar a la cima, (ahora que lo pienso la pasión por escalar montañas, parece que viene en los genes); pero cuando bajaron mi mamá enfermó, y desde entonces no podía respirar y el médico le dijo que si quería seguir con vida una vez por semana tenía que bajar hasta la otra ciudad que estaba a menor altitud, para respirar y oxigenarse, por unas semanas estuvo haciendo eso, viajando para respirar, pero los caminos de viaje también eran muy peligrosos y estaba pasando que a medida el frío se acentuaba nos íbamos a ir enfermando, yo por ejemplo ya estaba quedándome coja de las inyecciones que recibía por los resfríos. Entonces decidimos abandonar esa ciudad y regresar a vivir solas en nuestra casa en Tupiza.
.
A decir verdad, nunca pude comprender bien, cómo es que la gente allí, se acostumbró a vivir así, tal vez es que ellos no tenían otra alternativa que vivir como mineros porque no aprendieron otra cosa que ser mineros, y las mujeres no aprendieron otra cosa más que ser esposas de mineros, que si quedaban viudas cosa que a todas creo que les pasaba, porque no recuerdo haber visto allí ancianos, no les quedaba otra que trabajar como palliris, que son las mujeres que están picando las rocas y seleccionando los minerales, e incluso algunas hasta llegan a trabajan dentro de las minas, como los varones.
Hay un libro que un día de estos lograré comprarme "Fuego en el Hielo", hasta ahora no logré conseguirlo por la web, pero supe de él por esta Web http://www.communitymining.org/testimonios.htm, imagino que el libro debe estar muy interesante para leer porque es testimonial; y les dejo algunas imágenes para que tengan idea cómo son esos lugares en este otro link
algunas imágenes; si ven éstas imágenes, podrán ver que imposible encontrar ricos que estén allí peleando por riquezas, más bien todo lo contrario,y por eso y por tantas cosas más, de acá a la distancia, Bolivia, parece que por mucho tiempo más seguirá siendo el país que me duele, no solo porque si bien mis recuerdos de niñez están allí, sino también porque conozco a su gente.
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Chorolque, ahí fue donde viví unos cuantos meses, dicen que es el campamento minero más alto, el cerro mide cerca de los 5.600mts de altura y el campamento minero donde se vive está en los 4.800 mts; vivir en esas alturas, es realmente un desafío, es muy frecuente allá que mueran los bebés, de hecho creo que las parturientas para tener sus hijos van a otra ciudad, para que sus hijos al nacer puedan vivir, porque muchos mueren si nacen allá y no es que esté exagerando, realmente es así, no hay flores ni jardines, creo que ni los perros existen ahí, la temperatura llega ha ser de hasta 20ºC Bajo Cero, corre muchísimo viento que a los niños para ir a la escuela solían decirles, que había que ir atados en soga, o si el viento soplaba muy fuerte, tenían que sentarse o abrazar un poste, porque sino el viento te llevaba y como se está en la montaña uno puede llegar a caer y caer; y así por el viento caer por la montaña.
Cuando a veces mi mamá nos mandaba a buscar el pan, teníamos que ir hasta la panadería que quedaba un poco más arriba en la montaña, quizás 50 metros más arriba, no podíamos subir sin hacer un descanso, una porque no estábamos aún adaptadas a esas alturas y nos faltaba el aire entonces descansábamos, respirábamos un poco y luego seguíamos caminando, y el cuerpo siente falta de oxígeno que uno se agita enseguida. Pero, no solo era el frío aterrador y viento fuerte que asustaba de aquel lugar, sino más bien, lo otro, las muertes que sucedían dentro de la montaña, porque era muy frecuente el sonido de la sirena del campamento, y el repicar de las campanas que indicaban que había ocurrido un accidente, y los accidentes eran que en las explosiones algunos pudieron quedar atrapados u otros con una suerte no mejor, morir destrozados por alguna explosión; si estábamos en la escuela y se oía la sirena era feo ver a mis compañeritos que eran hijos de mineros, porque todos quedaban pensando si no podían ser el papá de alguien que haya muerto en esa explosión, entonces salían las esposas de los mineros a ver si sus esposos salían del socavón, y al que había muerto, pues con suerte se lo traía en unas bolsas, que horrible realidad la de los que viven allí, mi caso era distinto porque mi papá era docente así que eso no le iba a suceder, pero hoy me pongo a pensar en mis compañeritos de entonces, y qué feo vivir así verdad? aunque me temo y estoy más que segura que alguno de ellos se hicieron mineros, aunque ahora los centros mineros ya no funcionen como antes, sino más bien ya son pocos los que quedaron, pero quien sabe en una de esas alguno de mis compañeros se quedó allá, porque mineros, creo que solo se animan ha ser los hijos de mineros. De lo contrario, habría que estar algo locos y ser un poco suicidas, para ser mineros en esas minas, con apenas unos cascos, lámparas y dinamitas (al margen de esto, mis dos abuelos locos, también fueron mineros, bueno dicen que eso apenas cuando mi papá tendría como 3 años y mi mamá aún no naciera, pero que ninguno de ellos soportaron el vivir así, y partieron hacia otros lugares y medios de vida).
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Con mis hermanas y mi mamá apenas llegamos a vivir en Chorolque medio año, no pudimos soportar una vida así. Y por una cuestión de preservar la vida de mi mamá fue que tuvimos que dejar a mi papá solo allá y nosotros regresar a nuestra casa en Tupiza. Creo que tuve la suerte de tener unos papás muy osados y jugados, porque esas cosas que viví de chica son las que me prepararon para yo poder decir.. puedo vivir donde sea, Y así lo creo.
Cuando tuvimos que venirnos de allá, fue porque un día que si mal no recuerdo fue para el día de Santa Bárbara, mis padres decidieron escalar la montaña, costumbre del lugar era que para esa fecha los que se animaran subieran hasta la cima de la montaña, y ellos recién llegados, no bien adaptados decidieron escalar la montaña y así mi papá, mi mamá, y los dos hermanos de ellos subieron los cinco mil y tantos metros, logrando llegar a la cima, (ahora que lo pienso la pasión por escalar montañas, parece que viene en los genes); pero cuando bajaron mi mamá enfermó, y desde entonces no podía respirar y el médico le dijo que si quería seguir con vida una vez por semana tenía que bajar hasta la otra ciudad que estaba a menor altitud, para respirar y oxigenarse, por unas semanas estuvo haciendo eso, viajando para respirar, pero los caminos de viaje también eran muy peligrosos y estaba pasando que a medida el frío se acentuaba nos íbamos a ir enfermando, yo por ejemplo ya estaba quedándome coja de las inyecciones que recibía por los resfríos. Entonces decidimos abandonar esa ciudad y regresar a vivir solas en nuestra casa en Tupiza.
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A decir verdad, nunca pude comprender bien, cómo es que la gente allí, se acostumbró a vivir así, tal vez es que ellos no tenían otra alternativa que vivir como mineros porque no aprendieron otra cosa que ser mineros, y las mujeres no aprendieron otra cosa más que ser esposas de mineros, que si quedaban viudas cosa que a todas creo que les pasaba, porque no recuerdo haber visto allí ancianos, no les quedaba otra que trabajar como palliris, que son las mujeres que están picando las rocas y seleccionando los minerales, e incluso algunas hasta llegan a trabajan dentro de las minas, como los varones.
Hay un libro que un día de estos lograré comprarme "Fuego en el Hielo", hasta ahora no logré conseguirlo por la web, pero supe de él por esta Web http://www.communitymining.org/testimonios.htm, imagino que el libro debe estar muy interesante para leer porque es testimonial; y les dejo algunas imágenes para que tengan idea cómo son esos lugares en este otro link
algunas imágenes; si ven éstas imágenes, podrán ver que imposible encontrar ricos que estén allí peleando por riquezas, más bien todo lo contrario,y por eso y por tantas cosas más, de acá a la distancia, Bolivia, parece que por mucho tiempo más seguirá siendo el país que me duele, no solo porque si bien mis recuerdos de niñez están allí, sino también porque conozco a su gente.
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